Navegando por
Etiqueta: militantes

AUTOCRACIA PARTIDISTA

AUTOCRACIA PARTIDISTA

376views

images-copia

La partitocracia consagra el poder absoluto de los líderes políticos, pervirtiendo la democracia al convertir su voluntad en ley suprema que rige los designios de la organización que gobiernan, en la que sus militantes quedan para pegar carteles, buzonear programas, vigilar mesas electorales, sostener pancartas y gritar consignas en las manifestaciones.

Pero son los propios afiliados quienes promueven y consolidan el autoritarismo dentro de los partidos, cumpliendo mandatos contrarios a su conciencia, canonizando políticamente a sus líderes y anulando la voluntad propia, autoimponiéndose como norte de militancia la obediencia ciega a los jefes para mantenerse en la fotografía o salir en futuros carteles electorales. Mínimo ideario y máximo anhelo que consolida el poder absoluto de los grandes cortijeros del partido y su infalibilidad.

Esta identificación de poder, autoridad y dominio con posesión de la verdad absoluta, excluye toda discusión y alienta la sumisión incondicional de los subordinados a la voluntad patriarcal de los rectores, acallándose con sanciones y defenestraciones las tímidas voces divergentes, entre el silencio resignado de la mayoría que sigue la voz de sus amos.

Es la partitocracia responsable de la disciplina de voto y motivo del encumbramiento y ascenso de los déspotas a los altares partidistas, al ser estos quienes designan en bloque compacto a sus representantes para ser elegidos en pack indiviso por los votantes, en una democracia representativa, no del pueblo y los ciudadanos, sino de los partidos.

Una vez ocupada la peana por los mandamases, sólo tienen cabida las reverencias de los fieles y las genuflexiones de los devotos, pues los santos patronos otorgan favores a quienes se les antoja en función del fervor demostrado por los suplicantes en sus oraciones, sus golpes arrepentidos sobre el pecho, los propósitos de enmienda y las promesas de lealtad hechas por los demandantes al pedir sus favores.

Pero no todo puede ser controlado siempre por los capataces, circunstancia que les desconcierta e irrita sobremanera, cuando se impone a sus deseos la voluntad de personas independientes, alarmando a los sorprendidos reyezuelos de que los emancipados de servidumbres no sigan sus órdenes y se alejen del principio físico de inercia política, cuando la lógica personal delata los sofismas y la ética individual rechaza imposiciones inaceptables, por muy serios, ceremoniales, solemnes y teatrales que se pongan en la tribuna los usurpadores.

DISCIPLINA VS. CONCIENCIA

DISCIPLINA VS. CONCIENCIA

disciplina-dib-terminado

Se reúne hoy el máximo órgano del Partido Socialista entre Congresos, para decidir sobre la actitud que estarán hipotéticamente obligados a mantener los 84 diputados de su Grupo Parlamentario, con el fin de favorecer o evitar el acceso de Rajoy a la presidencia del Gobierno.

Esas doscientas y pico de personas que forman el “Parlamento Socialista”, -“pico” porque nadie sabe el número exacto de ellas al desconocerse quienes forman parte de él-, pretenden usurpar la voluntad de los representantes del pueblo que los eligieron, defraudando –de fraude- a sus militantes y decepcionando a los votantes que depositaron la confianza en los ciudadanos que los representan en el Congreso.

La actual situación va más allá de la coyuntura en la cual nos encontramos, obligándonos a reflexionar sobre un problema de mayor calado, que afecta a todos los partidos políticos y limita la libertad personal, en una democracia cuyos pilar básico es precisamente el respeto a las opciones individuales.

Someter la conciencia personal de cada cual a la disciplina impuesta por el partido es la mayor claudicación moral que sufre quien esa sumisión practica, y representa una mutilación de la voluntad individual intolerable para las personas que aspiran a conciencia plena con absoluta libertad.

Una cosa es definir la política general del Partido entre Congresos, elaborar programas electorales, ratificar estatutos, convocar primarias y congresos, aprobar presupuestos, fijar cuotas y designar candidatos, y otra muy distinta capar voluntades, violar opiniones, emascular criterios, cercenar opciones y mutilar empeños de los miembros de una organización, obligándoles a tomar decisiones contrarias al dictado de su conciencia, porque es una intolerable amputación de la más íntima libertad personal.

Imponer la disciplina externa a la conciencia privada es el camino más directo a la decepción y el abandono de quienes aspiran a personalidad propia y conciencia plena de sus actos fuera del redil, donde quedan corderos resignados y silenciosos que caminan hacia el matadero de su propia identidad personal, diluida en colectiva masa amorfa, cumpliendo mandatos contrarios a su propio juicio.

PESOS PESADOS

PESOS PESADOS

images-2

Los populares herederos directos de líderes franquistas que recibieron el espaldarazo político de sus progenitores, y otros tantos socialistas que durante años criticaron el franquismo, han seguido los mismos pasos, pretendiendo soldarse con autógena a los sillones institucionales, cantando a coro “No nos moverán”.

Oyendo las declaraciones de algunos pesos pesados populares y socialistas defendiendo estatutos enmohecidos y estructuras internas añejas para seguir silloneando, es fácil explicar la debacle de ambos, invocando el espíritu trasnochados ya invalidados por actuales exigencias sociales.

Muchos líderes populares y socialistas reconocidos por todos los votantes, llevan décadas viviendo lujosamente de la política, sin otro mérito que ser tocados por el dedo poderoso del jefe que los ha incluido año tras año en las listas electorales, perpetuándose en escaños y poltronas institucionales.

La negativa de los viejos elefantes populares y socialistas a irse al cementerio político con sus colmillos retorcidos y las arcas llenas hasta rebosar con los tesoros de las minas electorales tras décadas de neoneo, obliga a pensar en canonjías envidiables y privilegios categóricos de la profesión política en que convirtieron sus vidas.

Pedimos a los militantes ingenuos de ambos partidos que no se dejen embaucar con la magia de los prestigitadores que guardan conejos en la chistera para cautivarlos, aprovechando su inocencia; y prevenimos a los candorosos votantes que estén muy atentos porque jugarán con cartas marcadas y listas cerradas elaboradas por ellos, en las próximas elecciones.

SOCIALISTOS VS. SOCIALISTAS

SOCIALISTOS VS. SOCIALISTAS

La pérdida de nueve escaños en Euskadi y siete en Galicia pone a los socialistos en grave aprieto frente a los socialistas, ya cansados de que los primeros no dejen de mirarse al ombligo mientras ellos mantienen la disciplina ideológica sin quitarse el esparadrapo de la boca, salvo algunos como este bloguero, condenado al socialismo vocacional sin filiación política.

No pretendo hacer leña del árbol caído ni recrearme en el dolor ajeno, pero vengo reclamando desde hace años en la prensa y en este blog una necesaria catarsis en el socialismo español para eliminar a los socialistos que hoy están de nuevo lamiéndose las heridas ensimismados en el santuario de Ferraz y mirándose al espejo roto, sin percibir que el martillazo se lo han dado ellos mismos con sus aspiraciones desmedidas por seguir llevando las riendas de un caballo desbocado que terminará por despeñarse si los socialistas no lo remedian, como ya dije a los oídos sordos de los socialistos, con motivo de su 38 Congreso.

Negar la tozuda realidad conduce al suicidio, pero los sesudos analistas de la rosa no parecen darse cuenta de ello, permitiendo que la carcoma destruya el proyecto socialista de quienes apuestan por un ideario de valor indiscutible, descolorido por los socialistos que siguen perdiendo elecciones sin percibir que tienen mucha culpa en el hundimiento.

De nuevo está la pelota en el tejado de los militantes socialistas que tienen la obligación de moverse, aunque no vuelvan a salir en la foto, y decir en voz alta lo que pregonan por las esquinas. Hay que forzar las ventanas, abrirlas de par en par y dejar que corra el aire. Urge la renovación de caras, ideas, compromisos, programas y actitudes. Rostros con auténtica vocación de servicio público, sin atisbo de interés por perpetuarse en los cargos, ni hacer profesión política.

Ya no vale mirar para otro lado, ni silenciar la autocrítica, ni esconder la crisis bajo las alfombras, ni poner parches Sor Virginia. Urge el relevo, la renovación sin paliativos, la regeneración, el rearme moral y la imaginación para reinventar un nuevo partido sobre los cinco valores que han sustentado durante tantas décadas el verdadero y honrado socialismo.

Superar el gran esperpento de la continuidad, es la tarea. Esos espejos deformantes que Valle Inclán nos dejó en el callejón del gato, donde los socialistos observan una realidad distorsionada que les lleva a ceguera social,  empeñados en verlo todo a través del espejo cóncavo irreal  que conduce a una galopante presbicia mental, llevándose por el camino preciados valores que a todos pertenecen.

COMPROMISO DE CONCIENCIA

COMPROMISO DE CONCIENCIA

La noción de conciencia es múltiple, variable y escurridiza, pero ha de ser consecuente con el modo de pensar de cada cual. Por eso remuerde a quien la traiciona, provocándole el desasosiego que siempre acompaña a la decepción personal.

Pero de ahí no pasa el daño, porque el perjuicio que reporta al traidor su remordimiento, se ve compensado con el beneficio que recibe.

Tal es el caso de los militantes de partidos políticos que votan decisiones de las cúpulas dirigentes, en contra de su conciencia.

O el de los militares, obligados a matar a hipotéticos “enemigos”, cumpliendo órdenes de quienes nunca han empuñado un arma contra otro ser humano.

O los policías que reprimen indiscriminadamente con desmedida violencia a porrazo limpio y certero bolazo, manifestaciones de ciudadanos que piden trabajo, pan y justicia.

O el verdugo que ajusticia a un reo, sin conocerlo siquiera, cumpliendo una sentencia o sometiendo su voluntad a una orden externa.

Son objeciones de conciencia conculcadas sin justificación alguna, por mucho que los autores apelen a la obediencia debida, porque ante la muerte y la opresión no hay justificación que tranquilice las conciencias honradas, solidarias y humanitarias, que pagan con el insomnio eterno su claudicación.

RENOVACIÓN SOCIALISTA

RENOVACIÓN SOCIALISTA

No pretendo hacer leña del árbol caído ni recrearme en el dolor ajeno, pero tampoco voy a eludir arrimar el cuerpo a los pitones aunque me lleve una cornada de quienes no apartan su vista del espejo, recreándose en la belleza que sólo ven los protagonistas de la desgracia, sin atender la voz de los defraudados socialistas vocacionales.

Negar la tozuda realidad conduce al suicidio, y el injustificado desprecio al adversario acaba siendo la antesala de la desgracia. Sesudos analistas deben tener los abanderados oficiales de la rosa para no darse cuenta de la realidad y pensar que la culpa es de otros o de otra, cuando la carcoma puede ser interna, impidiendo que circule el aire por sus galerías al mantener cerradas las ventanas.

No merece la pena hacer el esfuerzo de bucear en hemerotecas para saber que los socialistas han perdido elecciones más por errores propios que por méritos ajenos, y esto no parece importarle mucho a los cabecillas que no se dan por aludidos, culpando a la crisis del hundimiento.

Ahora está la pelota en el tejado de los militantes que tienen la responsabilidad de hacer lo necesario para devolver a los “huidos” la confianza que un día tuvieron en el proyecto socialista. Tienen que atreverse a decir en voz alta lo que es de dominio público en mentideros y tertulias de todas las ciudades. Tienen que forzar las ventanas, abrirlas de par en par y dejar que corra el aire. Tienen que aparecer caras nuevas, sinceras, honradas, luchadoras, generosas, solidarias y fuertes, capaces de ilusionar y de convencer a los decepcionados. Rostros con auténtica vocación de servicio público, sin atisbo de interés por perpetuarse en los cargos, ni hacer de la política un modo de vida.

Ante las urnas no basta con tener razón, si los votantes piensan lo contrario, y la sordera social puede llevar a nuevos fracasos electorales. No vale mirar para otro lado, ni silenciar las críticas, ni esconder la crisis bajo las alfombras, ni poner parques Sor Virginia, ni hacer creer a los ciudadanos en ficticias elecciones primarias.

Creo llegada la hora del relevo en el socialismo, de la renovación sin paliativos, de la regeneración, del rearme moral, de la imaginación para reinventar un nuevo partido con los cinco valores que han sustentados tantas décadas esta ideología.

Cumplida su misión, la vieja guardia debe retirarse a los cuarteles de invierno. La catarsis era para los helénicos el mejor camino hacia la depuración. Y para alcanzarla empleaban tres elementos purificadores: agua, fuego y sangre. Especialmente este último, hasta el punto que la higienización exigía el sacrificio de algo por la causa. Pero no de alguien enfermo o malherido. Se necesitaba sacrificar alguien sano que representara los valores de la colectividad que pretendía sanearse porque si no se hacía esto ocurría el efecto contrario, pues sacrificar desperdicios no limpiaba, manchaba.

Mi respetado Felipe González ya dio ejemplo de ello el 20 de junio de 1997 ofreciéndose él mismo como víctima para el sacrificio, pero su ejemplo no fue bien seguido por los que todavía siguen. Abandonó la Secretaría General para forzar una renovación del partido que aún esperan muchos socialistas ajenos a la temerosa disciplina interna, deseando que se les ofrezca la oportunidad de votar una rosa con pétalos renovados en las próximas elecciones generales, porque están cansados de ver durante más de veinticinco años las mismas caras en los carteles.

Basta echar un vistazo a su Comité Federal para comprobar lo que digo. Apellidos que tienen que  dar paso a nuevos nombres si no quieren caer en la contradicción de haber criticado históricamente lo que ahora practican.

RENUNCIA

RENUNCIA

Versodiario 3 :

Que resuelvan los problemas                                                                                                            sin mirarse los ombligos,                                                                                                                    ni decepciones extremas,                                                                                                                    ni cadáveres de amigos

RENUNCIA

Las ondas acaban de traer a mi mesa de trabajo la noticia que muchos esperábamos hace tiempo, lamentando diariamente el retraso de una renuncia inevitable.

Se cierra un ciclo, pero debe mantenerse la guardia.  Concluye un periodo de indecisiones, pero debe fortalecerse la esperanza en el futuro.  Acaba una secuencia interminable de alternativas sin fortuna, pero han de renovarse las propuestas con innovadores bríos.

La renuncia de Zapatero a ser cabeza de lista en las próximas elecciones generales,  brinda al partido socialista la oportunidad de mostrar al país la solidez de su proyecto por encima de las personas que han de pilotarlo. Ofrece a los militantes la posibilidad de poner sobre el tapete la fortaleza de sus estructuras internas para consolidar un nuevo líder en plazo razonable. Pone en manos de los dirigentes la ocasión de mostrar a la sociedad la firmeza en sus convicciones para seguir luchando por sus valores fundacionales. Y otorga el privilegio al partido de exhibir su capacidad para seguir liderando el reino que ahora gobierna.

Si el partido socialista hace eso, su vida será larga, y el agradecimiento de quienes han puesto en ellos la esperanza, eterno.

Pero si la legítima y noble lucha por el poder interno se traduce en codazos inoportunos, en personalismos exacerbados, en puñaladas traperas y en la exterminación del adversario, entonces la crisis del partido se prolongara más allá de lo que muchos militantes y ciudadanos progresistas, esperan y desean.

A veces, mirar de frente al país modelo del más feroz capitalismo enseña que la unión es la fuerza que sostiene a los yanquis a la cabecera del mundo . Tal vez por eso Obama sentó a su derecha a Hillary Clinton.

Un consejo al socialismo español en estos momentos: es preferible un partido equivocado a un partido desunido.